Siete exponentes de la cinematografía polaca en La Habana
Por: Maya Quiroga
Organizada por la Cinemateca de Cuba se realizará en La Habana la Semana de Cine Polaco, del 8 al 12 de mayo en el Cine 23 y 12. La muestra está integrada por siete obras –en su mayoría rodadas en blanco y negro– y cada proyección se hará acompañar de una selección de los Noticieros Icaic Latinoamericanos.
Según Luciano Castillo, director de la Cinemateca de Cuba: “La cinematografía polaca figuró en un lugar cimero entre las del desaparecido campo socialista y continúa siendo una de las más importantes en el contexto del cine contemporáneo por su valiosa contribución al séptimo arte”.
Castillo añade que “en esta pequeña muestra converge desde un título tan renombrado como La última etapa (1948), hasta obras resonantes de los sesenta –dos interpretadas por el mítico Zbigniew Cybulski– junto a otras producidas en los albores del nuevo siglo por creadores de las nuevas generaciones. Excluimos a un inmenso creador como Andrzej Wajda (1926-2016), por haberle dedicado una amplia retrospectiva a raíz de su deceso”.
La semana abrirá con el estreno en Cuba el miércoles 8 a las seis de la tarde de la cinta Maximilian Kolbe (Una vida por otra) /Zycie za zycie del realizador Krzysztof Zanussi. Con 91 minutos de metraje es una coproducción entre Polonia y Alemania de 1991.
El filme cuenta con las actuaciones de Edward Zentara, Christoph Waltz, Artur Barcis y Gustaw Lutkiewicz. Está ambientado en 1941 y narra la historia del sacerdote polaco Maximilian Kolbe quien fue arrestado por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial y resultó recluido en el campo de concentración de Auschwitz.
En la sinopsis de este largometraje se especifica que un prisionero del campo de concentración se da a la fuga. Los nazis escogen a varios hombres al azar, para ser ejecutados y desalentar así nuevas escapadas. Cuando uno de los prisioneros elegidos, padre de familia, suplica por su vida, Kolbe se ofrece de manera voluntaria para sustituirlo.
El jueves 9 a las seis se exhibirá La última etapa (Ostatni etap, 1948) de Wanda Jakubowska un filme polaco de 81 minutos de duración interpretado por Tatjana Gorecka, Antonina Gordon-Górecka, Barbara Drapinska y Aleksandra Slaska.
También se centra en el campo de concentración de Auschwitz donde es enviada la judía Martha Weiss junto con su familia. El día de su llegada, por una coincidencia, Martha es elegida como intérprete, mientras que el resto de su familia es asesinada. Se trata de una obra muy importante del cine polaco pues resultó ganadora del premio al mejor filme en el Festival Internacional Karlovy Vary y nominado al premio BAFTA.
Adiós, Hasta mañana (Do widzenia, do jutra, 1960) es la propuesta para el viernes 10, dirigida por Janusz Morgenstern y con las actuaciones de Zbigniew Cybulski, Teresa Tuszyńska, Grażyna Muszyńska, Barbara Baranowska y Roman Polański. En 80 minutos nos habla sobre el encuentro romántico entre Jacek y Margueritte que se entrelaza con las escenas de participación de los creadores y los actores de los teatros Bim-Bom y Co To, filmadas en los sótanos estudiantiles de Gdańsk.
Los episodios de la vida estudiantil rompen la trama principal de la acción, lo que le confiere un estilo de narración ligera. La película recoge algunas virtudes de la Nueva Ola francesa y ha sido una precursora de este fenómeno en la cinematografía polaca.
El sábado 11 en la función de las cinco se podrá ver la cinta El manuscrito encontrado en Zaragoza (Rekopis znaleziony w Saragossie, 1965) dirigida por Wojciech J. Has. En los roles protagónicos se encuentran Zbigniew Cybulski, Ica Cembrzyńska, Elżbieta Czyżewska y Gustaw Holoubek. Se basa en la novela de Jan Potocki donde un capitán de las tropas napoleónicas, Alfonso van Worden, recién llegado a Madrid, descubre gracias a dos princesas moriscas que está destinado a grandes empresas, por las cuales deberá superar numerosas pruebas. Comenzará entonces una sucesión de aventuras, desarrolladas bajo la influencia de un cabalista y un matemático.
A las ocho de la noche se exhibirá La vida de Mateo (Żywot Mateusza, 1967) del director Witold Leszczyński con actuaciones de Franciszek Pieczka, Anna Milewska, Wirgilusz Gryń y Aleksander Fogiel. Basada en la novela Los pájaros del noruego Tarjei Vesaasa nos lleva de la mano de Mateo, un hombre hipersensible con alma de niño, que es tomado por tonto por quienes le rodean. Él vive en plena armonía con la naturaleza junto a su hermana Olga, en una cabaña solitaria entre bosques y lagos en algún lugar al norte de Europa. Su vida tranquila, casi idílica, se verá interrumpida por algo inesperado. La naturaleza le advierte sobre la desgracia que se aproxima: su amigo “gran pájaro” ha sido abatido, el árbol que lleva su nombre ha caído derribado por un rayo y de noche le atormentan oscuras pesadillas…
La vida es una enfermedad mortal de tranmisión sexual (Życie jako śmiertelna choroba przenoszona drogą płciową, 2000) se titula el largometraje dirigido por Krzysztof Zanussi que se podrá ver el dominto 12 a las cinco. En esta coproducción entre Polonia y Francia actúan Zbigniew Zapasiewicz, Krystyna Janda, Tadeusz Bradecki y Monika Krzywkowska.
Su sinopsis dice que los habitantes de una pequeña ciudad medieval se congregan en la plaza donde se ahorcará a un bandido. Esto sólo forma parte de una película que se está rodando. Entre los miembros del equipo se encuentra un médico, que padece una grave enfermedad.
Este filme inteligente sirve para reflexionar acerca de la finitud de la vida, la trascendencia, la fe y la incredulidad. Ganó el premio San Jorge de Oro en el Festival de Moscú, el premio Águila al mejor filme nacional del año y el premio León de Oro en el Festival de cine polaco de Gdynia, entre otras distinciones.
Por último, el domingo 12 en la función de las ocho se exhibirá Palimpsesto (Palimpsest, 2006) del realizador Konrad Niewolski, filme ganador del Premio Especial del Jurado en el River Run Film Festival; mejor fotografía (ex aequo) en el Festival de Cine Polaco. Cuenta con las actuaciones de Andrzej Chyra, Magdalena Cielecka, Robert Gonera y Tomasz Sapryk.
En su sinopsis se señala que el inspector de policía Maciek Hajdziak ha muerto. La autopsia revela que cayó de una gran altura. A su compañero Marek le encargan la investigación del caso, y comienza a indagar. Marek era amigo cercano del fallecido y toma el caso de manera muy personal: se concentra absolutamente en su trabajo y tiene pesadillas y visiones.